Ser banderizo era un gran y buscado honor entre los soldados. Su cometido en batalla era la de alinear la formacion, indicar por sus movimientos las acciones a seguir por las huestes, puntos de reagrupamiento e identificación...etc. De este modo el soldado podia conocer por el movimiento y la posición de la enseña la situación tactica y contar con un punto de referencia al que seguir en cuanto al caos en la batalla. Por estos motivos se convertia en un gran riesgo ya que el enemigo tendía a capturarlas tanto por su papel táctico como por el simbólico.
Las enseñas se entregaban, por lo general, a hombres veteranos, de gran valor en batalla y moralmente dignos de ellas. Normalmente solían ser oficiales de baja graduación pero con amplia experiencia en combate.
Junto con los banderizos os presento a mis huestes. Portan escudo de madera con rodela, lanzas, picas y alabardas.
Espero que os haya gustado. Un saludo y hasta la próxima.